Hola de nuevo, vamos a hablar de una de las cientos de cosas que consideró vudú dentro de la cocina, hablemos del "curado" de un molcajete. Suena como a magia ¿no? de hecho si lo analizamos; es un proceso bastante obvio, sin embargo, es raro verlo escrito en algún libro o documento.
Ahora bien, lo primero que debemos tener es un molcajete, el cual se puede adquirir directamente en el mercado, pero ¡ojo! aunque no están definidos los criterios para saber como elegir unos de estos instrumentos, dentro de lo que estuve investigando y en lo que debemos fijarnos es lo siguiente: Debe ser de color negro (auténtico, no pintado), ya que esto asegura que por lo menos es de piedra volcánica, deber ser pesado en relación a su tamaño y hay que buscar que el poro de la roca sea lo más cerrado posible. Estas mismas especificaciones aplican para el tejolote (piedra con la que se muele en él)
Una vez que tenemos entre manos a este pesado amigo, empieza el proceso del que es tema el presente artículo; de lo que encontré en las fuentes consultadas y casi todas coincidían, es que existen dos métodos más o menos utilizados para curarlo. Uno es moliendo sal gruesa de mar y luego maíz quebrado, el otro es con arroz crudo. En este caso, del que les voy a hablar es con arroz. Entonces, tomamos un puñado de arroz, lo colocamos en el molcajete y comenzamos a triturarlo hasta que se forme un polvillo blanco. Nota importante: si este polvillo sale de color gris o incluso negro, todavía no está listo y tenemos que seguir moliendo y reponiendo el arroz hasta que se obtenga claro (este criterio aplica también cuando se realiza con sal y maíz quebrado)
En cuanto está listo, la superficie del mocajete deberá estar completamente blanca, lo mismo que la punta del tejolote, se desecha el arroz, se lavan de inmediato con agua y escobeta para eliminar los restos de grano, se dejan secar y ya están listos para cocinar.
Para acabar esta nota y seguir fiel al a costumbre, quiero poner algunos datos que considero interesantes. La palabra molcajete (molcaxitl) es de origen náhuatl, compuesto por las raíces molli, salsa y caxitl, recipiente o vaso. Asimismo, tejolote (texolotl), proviene de tetl, piedra, y xolotl objeto cilíndrico. Espero que esta información les sirva para la próxima vez que adquieran uno de estos instrumentos, por que si somos francos, el sabor de las salsas que se preparan en molcajete es insuperable, además de dar un toque rústico a nuestra mesa.
Excelente artículo
ResponderEliminarGracias. Muy útil la información.
ResponderEliminarAlfin alguien q si sabe,grasias x tus consejos
ResponderEliminarHola, quiero saber si después de curarlo con arroz, puedo seguir moliendo arroz ya que necesito moler el arroz para sacar la harina si es posible? le agradezco su respuesta.
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